¿Cómo funciona el autoconsumo residencial?
El autoconsumo residencial funciona mediante la instalación de paneles solares en viviendas para generar energía eléctrica a partir de la radiación solar. Esta energía producida puede utilizarse directamente en el hogar, reduciendo la dependencia de la red eléctrica convencional.
¿Qué tipos de instalaciones de autoconsumo residencial existen?
Existen dos tipos de instalaciones de autoconsumo residencial: el autoconsumo conectado y el autoconsumo aislado. En el autoconsumo conectado, la vivienda permanece conectada a la red eléctrica convencional, lo que permite compensar los excedentes de energía producida. En cambio, en el autoconsumo aislado, la vivienda se desconecta de la red y puede requerir el uso de baterías o generadores para asegurar el suministro eléctrico en momentos de baja radiación solar.
¿Cuáles son los componentes necesarios para una instalación de autoconsumo residencial?
Para una instalación de autoconsumo residencial se requieren varios componentes. Primero, los paneles solares son necesarios para captar la radiación solar y convertirla en energía eléctrica. También se necesita un inversor de red, que transforma la corriente continua generada por los paneles solares en corriente alterna utilizada en los hogares. Además, es necesario contar con un vatímetro medidor de consumo para llevar un control preciso de la energía generada y consumida.
¿Cuánto cuesta y cuánto se puede ahorrar con el autoconsumo residencial?
El coste de una instalación de autoconsumo residencial puede variar dependiendo de varios factores, como el tamaño de la instalación y los componentes utilizados. Sin embargo, en general, el coste de inversión puede ser compensado a largo plazo debido al ahorro en la factura eléctrica. El ahorro obtenido dependerá del consumo de cada vivienda, pero se estima que puede ser significativo, reduciendo hasta un 70% o más de la factura eléctrica.
¿Es necesario disponer de baterías para el autoconsumo residencial?
No es estrictamente necesario disponer de baterías para el autoconsumo residencial. En el caso del autoconsumo conectado, la instalación está conectada a la red eléctrica convencional, lo que permite utilizar la energía excedente producida durante el día en momentos de menor radiación solar. Sin embargo, en el autoconsumo aislado, donde no hay conexión a la red, las baterías o generadores pueden ser necesarios para garantizar el suministro eléctrico en momentos de baja radiación solar. La necesidad de baterías dependerá de la autonomía energética que se desee alcanzar.